¡Hola!
Estoy en plena ola de inspiración y con algo más de tiempo para escribir, así que lo aprovecho y os regalo esta entr-hada con paso de baile. Y ya que mi anterior entrada estaba dedicada a Melody Piper, hoy os comparto las fotos de una de sus mejores amigas: Justine Dancer, hija de la decimosegunda Princesa Bailarina.
El cuento de su madre es "Las princesas bailadoras" de los hermanos Grimm, también conocido como "Las doce princesas bailarinas". Es un cuento muy hermoso lleno de magia y misterio, del que podemos encontrar versiones en diferentes partes del mundo.
Aquí tenemos a Justine. Su cara es fabulosa: Sus ojazos verdes y su sombra de ojos dorada, en contraste con sus labios rojos, hacen que esta muñeca llame la atención. Por no hablar, por supuesto, del color de su piel. Me encantan las muñecas de piel oscura.
Su pelo es castaño oscuro, ondulado, sin mechas de otros colores, y sobre su cabeza lleva una corona de diamantes, que hace referencia al cuento, y de la que hablaré después.
Aquí vemos más de cerca sus zapatos. Para el personaje de Justine, los zapatos son muy importantes, ya que en su cuento las princesas gastan un par de zapatos cada noche. ¿Por qué?
Ese es el misterio que deben descubrir los aspirantes al trono y a la mano de una de las doce princesas.
Los zapatos de la muñeca son bonitos, muy finos y elegantes, de baile de salón.
Sin embargo, dado que de zapatos va el cuento, deberían haber explotado un poco más ese aspecto dando más detalles sobre zapatos a la muñeca. Tal vez en el estampado de su vestido, no sé... De hecho el vestido es muy bonito, dorado con lazos estampados, que podrían ser perfectamente lazos de zapatillas de baile. Y el bajo es de tul negro con brillantina.
En esta foto más de cerca se ven los complementos, que hacen referencia al cuento.
Todo el outfit de Justine combina los dorados y plateados, y la razón nos la da su historia.
En el cuento, varios príncipes intentan desvelar el secreto de las princesas: por qué cada noche gastan un par de zapatos cada una, y por qué amanecen con una ojeras hasta los pies. Mas todos fracasan, y es un soldado que regresa de la guerra quien logra descubrir el misterio.
Él consigue seguirlas al mundo subterráneo, donde atraviesan tres jardines: uno de plata, otro de oro y el último de diamantes. El soldado coge de cada jardín una flor o una planta como prueba de que las ha seguido.
La pulsera de Justine es la del jardín de oro, el collar, del jardín de plata, y la corona, del jardín de diamantes.
Tiene un cinturón plateado con un adorno rosa en medio. La forma del cinturón me recuerda a la flor de Lys, pero no tengo ni idea de qué simboliza. Si alguien lo sabe y me lo quiere contar, se lo agradezco ;)
Aquí vemos un primer plano de su carita.
Lo dicho, ¡una pasada!
Se ha puesto sus zapatillas de ballet, que es una de sus asignaturas favoritas.
Y es que el swing, el bolero, el bals y el cha cha cha
están muy bien, pero también le encantan los pliés, los jetés y las piruettes.
Aquí se aprecian mejor sus zapatos plateados y su bolso dorado, que es muy cuco, muy de princesa.
Las siguientes fotos se las quiero dedicar a mi estimada Laura, escritora del blog historiasdeprincesasyrebeldes , a quien sé que le gusta mucho Justine, y que una vez escribió lo siguiente (cito directamente de su blog):
Justine Dancer:
Yo sé que es la hija de la doceava bailarina pero... ¿no es igualita a
Tiana? Quiero que forme parte de mi colección y me darán ganas de
hacerla hija de Tiana y el Sapo. Esta muñeca es preciosa, me encantó
desde que la vi por primera vez, pero después de ver mejores fotos
caseras ¡es muy bonita! Además de que tiene a su favor lo de la piel
oscura que me encanta.
Bueno, pues yo estoy de acuerdo con Laura, así que la muñeca de mi Justine no podía ser otra que Tiana.
Aquí está abrazándola con mucho cariño.
Cada mañana, cuando vuelve a su cuarto, le cuenta a Tiana sus correrías por los salones de baile.
Es que se parecen un montón...
Pero a parte del parecido físico, hay algo más que las une.
Es un secreto, que Justine tiene bien guardado.
Tan bien guardado como el secreto de a dónde va por las noches.
Sin embargo, si alguien lo descubriera...
Muy de mañana, Justin regresaba sobre la punta de los pies a su cuarto, tras una larga noche danzando, cuando...
Dexter: ¡Hey, Justine! ¿Qué haces levantada?
¡Vaya! ¡Menudas ojeras que tienes! ¡Y que machacados están tus zapatos!
Parece que hubieras pasado la noche entera bailando...
Justine: ¡Patapufff!
Dexter: ¡Oh, no! ¡Justine! ¿Eres tú?
¡Qué he hecho! ¡No sabía que eras pariente de Hopper!
Justine: Crooaaac...
Dexter: Y ¿ahora qué hago?
Melody: Tranquilo Dexter. Esto lo mezclo yo.
Justine: ¡Patapuff!
Dexter: ¡Gracias Melody! Si no fuera por tí...
Melody: De nada. Pero a partir de ahora, si te encuentras con Justine de madrugada, limítate a desearle "buenos días".
Justine: Gracias, Melody. ¿Sabes? Al siguiente baile que vaya, tú te vienes conmigo para pinchar.
Melody: ¡Eso está hecho!
Estas chicas hacen una buena mezcla.
Y aquí está Justine con su cuento.
Esta es una versión en español, de editorial Edelvives, e ilustrado por Miss Clara.
Una joyita para l@s coleccionistas.
Y aquí con una versión británica ilustrada por Jane Ray.
Otra maravilla de libro.
Aquí os muestro uns de las ilustraciones de Jane Ray, cuando las princesas están exhaustas por la mañana, bostezando sin parar.
El hecho de que Justine tenga la piel oscura me hace pensar en una versión africana de este cuento, Los zapatos gastados de bailar, de Cabo Verde, en el que solo aparece una princesa, y baja al mundo subterráneo a bailar con los demonios. Un cuento muy gracioso, con un final sorprendente.
¿Qué os parece Justine? ¿Forma parte de vuestra colección?
¡Gracias por leer!